Además de sus grandes éxitos y de gran popularidad, el rey del pop nos dejó una herencia muy particular, algo más que su música.
Hace unos cuantos años, Jackson era blanco de la prensa y los defensores de los animales, cuando creó un zoológico privado en Neverland, su finca de 1050 hectáreas en el Estado de California.
Su mascota más famosa era un chimpancé llamado Bubbles, que adoptó de un laboratorio médico en 1985 y lo tenía en su casa como un integrante más de su familia, en varias oportunidades declaró que lo consideraba como un hijo más.
Este fue el primero de una cantidad incalculable de animales exóticos, muchos de ellos en extinción, que el rey del pop tenía en su castillo.
También fue muy polémica la adquisición de dos tigres, apodados Thriller y Sabu, junto con cuatro jirafas, varios reptiles y una gran cantidad de pájaros exóticos, completaban su zoológico personal.
Si te preguntas que pasó con todos esos animales después de su muerte, muchos de ellos fueron vendidos para pagar las enormes deudas que el rey del pop tenía consigo y como casi toda la vida de la estrella muchas cosas aun son una incógnita.
